Un recuerdo para Ángel Sanz Teruel y su carrillo de Chucherías. Hoy traemos a la memoria de muchos loperanos al entrañable Ángel Sanz Teruel “Angelillo el de las pipas”, el cual primero con canastilla y después con su inconfundible carrillo color verde, hizo durante varias décadas la delicias de los niños de Lopera vendiendo chucherías bien en el Paseo de Colón o en los cines de invierno y verano. Luego puso en su propia casa una pequeña tienda donde todos los domingos bajaban los niños para adquirir unos dulces con los que te chupabas los dedos. Toda una institución que recordamos con gran alegría cuando lo vemos por Lopera en verano. Como curiosidad, el carrillo de chucherías que Angelillo utilizó durante mucho, en su origen fue el carro del bebé loperano Juan Merino Valenzuela, que tras crecer fue vendido el carro por Juan Merino padre al bueno de Angelillo, el cual transformó en un carrillo de chucherrías.